Clyde Shelton (Gerard Butler) es un honesto hombre de familia
cuya esposa e hija son brutalmente asesinadas en su propia casa. Cuando los
asesinos son detenidos, el caso le es asignado a Nick Rice (Jaime Fox), un
prestigioso fiscal de Filadelfia. Nick (que quiere ganar cualquier caso, cueste
lo que cueste) propone a uno de los sospechosos la posibilidad de conseguir una
sentencia leve a cambio de que testifique en contra de su cómplice. A partir de
aquí, Clyde decide tomarse la justicia por su cuenta, borrando del mapa a todo
aquél que impide que la justicia pueda funcionar correctamente.
Para empezar, me gustaría
decir que he decidido elegir esta película debido
a su contenido pero en
especial a su
facilidad de crear debates sobre qué es
éticamente correcto y qué
no.
Creo que este es un tema más que delicado y la variación opiniones personales pueden ser cuantiosas.
En mi opinión, no creo que sea moralmente correcto tomarse la justicia por tu cuenta y mucho menos de la manera que ha hecho el protagonista. Si todos actuáramos de tal modo nuestro sistema político se basaría en algo más que parecido a una anarquía. Pienso que hay formas y formas de luchar por algo o contra algo y la peor manera de hacerlo es por la fuerza, y más en una democracia.

Como ya dije al principio es un tema muy delicado que hay que medirlo con la regla de la prudencia.
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